Así como los animales, debemos seguir viviendo en manadas para poder y lograr realizarnos como personas, necesitamos sentir aprecio y afecto de algún ser semejante a nosotros, necesitamos que nos vitoreen o abucheen para poder enfrentar el día a día en éste espeluznante mundo en el que vivimos de momento.
¿Pero si alguna persona viviera como ermitaño? Y de hecho las hay, y también hay personas que catalogan a ésos ermitaños como locos ya que lo que ellos piensan no va nada de acuerdo con la experiencia empírica que han tenido los no ermitaños, pero asimismo, para un ermitaño, la persona loca sería el individuo que lo consideró loco primeramente, simplemente por las mismas razones, pero si se llega a un acuerdo y la tolerancia predomina por ambas partes y la convivencia es posible, y aunque las opiniones sean totalmente diferentes pero existe un esfuerzo para poder comprender (no entender) y de ése comprendimiento los involucrados encuentran alguna enseñanza, entonces todo está bien.
Cuando una sociedad (la predominante) decide vivir como borregos, y la mayoría no puede abrirse a ninguna posibilidad diferente a lo que conoce porque es más fácil estar cómodos con lo que se conoce desde siempre y aunque se sepa que los más ricos son los que nos titiritean y por nuestro esfuerzo y trabajo lo son cada día que pasa, y aunque hayamos inventado los derechos humanos, y aunque inventemos leyes que nos protegen o castiguen, y aunque queramos cambiar de alguna forma nuestra manera de vivir, siempre nos dejamos someter por algún tipo de control y manipulación de masa. Las pruebas existen, pero es más cómodo y fácil que otra persona decida por nosotros (aquí me pregunto lo de siempre: ¿la individualidad dónde quedó?). Se nos hace sentir miedo por cosas insignificantes y así someternos, pero lo peor es que la gente no lo sabe, y si lo sabe, lo pasa por alto diciendo que no se puede hacer algo en contra de lo que siempre hemos tenido (borregos).
Aquí en México nos obligaron a mandar nuestros datos personales a una base para registrar nuestro teléfono celular con el único fin de tratar de exterminar las extorciones telefónicas de las que muchas personas hemos sido victimas. La realidad es que la delincuencia se termina generando empleos bien pagados, y la otra realidad es que al implementar el registro al RENAUT (REgistro NAcional de Usuarios de Telefonía Móvil) el gobierno tiene y sabe con mayor exactitud dónde hace, que hace, cuánto hace, qué dice, cada uno de nosotros, pero la verdadera realidad y lo que demasiados ciudadanos no saben porqué se nos obligó a registrar nuestros celulares pasando por alto y sin importar los derechos judiciales, civiles y humanos que cada uno de nosotros tenemos es para evitar manifestaciones, "terrorismo" como lo llaman ellos, golpes de estado y todo lo que pueda afectar lo que realmente traman los poderosos. Si no se registran los teléfonos a nombre de sus dueños, simplemente se suspenden las líneas. ¿Y nos creemos y sentimos libres?
Pero si la masa está de acuerdo a que el gobierno sepa aún más de nosotros y cree en todo lo que se les indica, entonces nosotros los que sabemos que son fraudes ¿qué podemos hacer? ¿si no puedo con el enemigo me le uno? qué fácil. Nuestro trabajo no es hacer que la gente crea lo que pensamos, aunque las pruebas sean irrefutables, simplemente es hacer que sepan que puede existir algo más de lo que siempre han sabido, poco a poco la masa se conscientiza para hacer lo que siempre hemos hecho: evolucionar.
Simplemente depende de ellos para ser racionales. Nadie tiene la certeza de todo lo que es (somos humanos ¿recuerdan?). Pero si somos capaces de comunicarnos virtualmente, entonces somos capaces de comunicarnos telepáticamente, nuestro nuevo y siguiente sentido.
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