En Noviembre de 1955, por Decreto NSC 5412/2, se creó un comité de estudio de todos los factores tendentes a establecer y ejecutar un plan director para la política extranjera en la Era Nuclear.
Una vez más, sólo se trataba de un vulgar pretexto que debía ocultar el fin real del estudio, es decir, la Cuestión Extraterrestre.
El NSC 5412/2 se creó sólo como tapadera en el supuesto de que la prensa comenzara a buscar las razones por los cuales hombres tan importantes se reunían tan frecuentemente.
Se trataba, ni más ni menos, que de una segunda fase del Grupo Quantico (ahora llamado Quantico 2), cuyas reuniones fueron presididas por Henry Kissinger. Nelson Rockefeller fue un asiduo visitante a todas las sesiones.
A finales de 1956, el Grupo de Estudio fue aparentemente disuelto y Henry Kissinger publicó en 1957 los resultados, supuestamente oficiales, bajo el título "Armas Nucleares y Política Extranjera", publicado por el CFR en la Editorial Harper & Brothers (Nueva York). Aunque realmente Henry Kissinger escribió más del 80% de este manuscrito durante sus estudios en Harvard.
El Grupo de Estudios continuó con sus trabajos en secreto.
Uno se puede hacer una idea de la importancia que Henry Kissinger daba a este grupo de estudios escuchando las declaraciones de su mujer y de sus amigos: muchos de entre ellos admiraban el hecho de que éste abandonaba su casa muy temprano y regresaba por la noche, sin hablar con nadie y sin contestar a ninguna pregunta. Parecía vivir en un mundo en el cual no había sitio para ningún otro. Estas declaraciones son muy significativas.
Los resultados del estudio sobre la presencia y los actos de los Extraterrestres debieron impresionarle profundamente. Henry Kissinger no era el mismo durante el tiempo que duraron estas reuniones. Y nunca más conoció acontecimientos tan graves como en esa época. Trabajaba a menudo hasta muy tarde, después de un intenso día de trabajo. Estas circunstancias fueron lo que le condujeron finalmente al divorcio.
Una de las conclusiones más destacadas de este estudio sobre los Extraterrestres fue que no se podía decir nada al gran público, ya que su conocimiento hubiera conducido probablemente al derrumbe de la economía, de las estructuras religiosas y a un pánico nacional que desembocaría en una anarquía total.
De esta forma la conspiración del silencio siguió adelante. Por lo tanto, ya que nada se podía hacer público, el Congreso evidentemente no debía tener conocimiento de esto.
La financiación de los Proyectos y de la investigación debía por lo tanto conseguirse de fuentes extra-gubernamentales. Como solución intermedia se consiguió dinero del presupuesto militar y de los fondos secretos disponibles de la CIA.
Es entonces que los que detentaban el poder pensaron que una de las posibilidades de financiación de los Proyectos Extraterrestres o de otros Proyectos Secretos era organizar un mercado ilegal de la droga.
Se pensó que la droga, transportada por barcos de pesca desde América del Sur hasta la isla de Bohr, podría seguidamente ser llevada a tierra por barcos de aprovisionamiento de la Armada, cuyo cargamento no era inspeccionado ni por la aduana ni los guardacostas, por lo tanto no levantaba sospechas ni era sometido a ningún control.
Un ambicioso joven miembro del CFR fue contactado. El plan funcionó mejor que lo previsto y aún hoy en día está en vigor en el mundo entero.
Hay, evidentemente, otros métodos para introducir drogas en el país. Pero, a pesar de todo, deberíamos acordarnos que la CIA controla todos los mercados de la droga del mundo.
Mientras tanto, ocurrió algo imprevisto: ignorando los consejos y directrices para establecer un proyecto conjunto en el control del Espacio, el 4 de Octubre de 1957, ante la sorpresa del mundo y la irritación de los Aliados, los rusos tomaron la delantera con el lanzamiento del Sputnik 1, el primer Satélite Artificial Terrestre.
Esto fue lo que precipitó el inicio de la Carrera Espacial entre ambas Superpotencias. Y durante los 12 años siguientes, los militares soviéticos y norteamericanos, fueron confirmando lo que ya sabían o imaginaban, y mucho más.
KENNEDY
Bien podríamos llamar a los años de 1959 a 1969, la "Década Maravillosa". Al menos, lo fue para el MJ-12.
En 1959, por fin el Proyecto Sigma, gracias a la utilización de un lenguaje binario de computadora, logra iniciar una rudimentaria comunicación por radio con los extraterrestres de Zeta Retículli.
En 1960, siempre bajo el Proyecto Gleem, fue creado el Proyecto Plato, con la misión de organizar un aterrizaje para establecer relaciones diplomáticas con los Zeta.
El Programa Espacial oficial de los Estados Unidos fue notablemente incrementado por el Presidente John Kennedy. Al inicio de su mandato, el 25 de Mayo de 1961, un Kennedy firme y sereno asombró al mundo, prometiendo que, antes de finalizar la década, un hombre norteamericano caminaría sobre la Luna.
El 24 de Mayo de 1962, en una Base del Estado de California, Kennedy y otras personalidades de USA, asistieron a un nuevo Encuentro con la Federación Galáctica. La noticia del Encuentro se filtró por vía diplomática, siendo descrito por el Cónsul Alberto Perego, testigo ocular de los hechos.
Según otra información que circuló entre los grandes del Pentágono y los responsables de la política, Kennedy tuvo un segundo encuentro con un Ser Extraterrestre el mismo año.
A este nuevo contacto, siguieron otros hechos que confirmaron a Kennedy en una determinada línea de acción y de política internacional.
Pero llegó el momento en que Kennedy descubrió parte de la verdad con respecto a la droga y los Extraterrestres, y en 1963, dirigió un ultimátum al MJ-12. Amenazó al comité de acabar con el problema de la droga si ellos no lo hacían.
Informó al MJ-12 de su intención de dar a conocer al pueblo americano la existencia de los Extraterrestres y preparó un plan para llevar a cabo esta decisión.
La decisión del Presidente Kennedy inquietó a los responsables, y el MJ-12 decidió su asesinato, llevado a cabo el 22 de Noviembre de 1963 por los Agentes del MJ-12 en Dallas.
Kennedy fue asesinado por el Agente William Greer, que conducía el automóvil descapotable, en Dallas.
Además todos los testigos oculares que vieron a Greer disparar sobre Kennedy fueron también asesinados durante los siguientes dos años.
La Comisión Warren para "investigar" el asesinato fue una farsa: se componía en su mayoría por miembros del CFR.
Sus esfuerzos por confundir al público de USA fueron exitosos, y en los años posteriores, muchos otros norteamericanos que han intentado que la Verdad sea conocida, han sido a su vez asesinados.
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